ELIA MOON

ELIA MOON
COSMETICA NATURAL Y BIOLOGICA

domingo, 1 de marzo de 2009

Reafirmante Corporal Elia Moon



Combate la flacidez de los tejidos, devolviendo la tonicidad y firmeza de los mismos y mejorando notablemente la apariencia de las zonas afectadas.REAFIRMA de forma natural y eficaz el busto, glúteos, abdomen etc.Gracias al poder reafirmante y regenerativo de esta Crema, se combate la flacidez y su aplicación constante, permite conseguir una piel tersa y bella.


Con Hamamelis, Cola de caballo, Colágeno, Elastina, Centella Asiática, Hiedra
y Vitamina E


*Cola de Caballo


PROPIEDADES: Diurética y remineralizarte, contribuye al mantenimientodel colágeno (sustancia fundamental del tejido conjuntivo) y aumenta tantola elasticidad de los tejidos como las defensas inespecíficas del organismo.Astringente, hemostática por vasoconstricción local, depurativa ycicatrizante.


*Hamamelis


EFECTOS DE LA HAMAMELIS:
Bacteriostático, activo frente a Gram.Vaso protector capilar-tropo:Acción vitamínica P.Vasoconstrictor.Tónico venoso (taninos condensados).Astringente y hemostático en aplicación tópica (taninos).Antiinflamatorio tópico.
APLICACIONES DE LA HAMAMELIS:

Insuficiencia venosa: varices hemorroides, ulceraciones y edemas de miembros inferiores, flebitis, pequeñas heridas y cuidado de la piel.


* Colageno


El colágeno es una de las proteínas de la dermis que mantiene la unión de los tejidos subcutáneos y cuyas terminaciones sostienen la piel, dándole firmeza y tersura. Cuando el colágeno se deja de producir o se desgasta por los efectos de los rayos de sol, es que se van formando primero finos surcos, las temidas arrugas y el descolgamiento de los tejidos

* La Elastina


La elastina es una ancha molécula en forma de resorte responsable de la elasticidad de la piel se va alterando con la edad. Para uso cosmetológico, se fracciona e hidroliza en péptidos de elastina que consiguen franquear la barrera cutánea. Las moléculas más grandes quedan en la superficie de la piel y tienen un efecto hidratante comparable al del colágeno.

*Centella Asiática.
Esta sustancia de origen vegetal, estimula el proceso de reparación de los tejidos. Sus efectos son cicatrizantes, antiinflamatorios, activa la circulación y evita la retención de líquidos. Previene y elimina la celulitis.


*EXTRACTO de HIEDRA (Hedera Helix):


Compuesto por glucósidos, saponinas, inosita, ácido fosfórico, málico y clorogénico. Efectos anticelulíticos, antimicóticos, antiparasitarios, descongestivos y tonificantes.

*La vitamina E,


es un componente clave en la estructura de las células del cuerpo y ayuda a mejorar el sistema inmunológico lo que previene la degeneración celular. La vitamina E en cremas cosméticas aumenta la micro-circulación de la piel (el fluyo sanguíneo) asegurando una mejor alimentación del tejido mejorando la elasticidad de la piel y reduciendo las arrugas. La aplicaciones externas de vitamina E ayudan a inhibir las inflamaciones y a curar las cicatrices. Estas propiedades anti-inflamatorias ayudan al a piel en su proceso regenerativo natural. Es especialmente útil para reducir las cicatrices después de la cirugía o en los casos de acne. Este también provee una protecciones natural en contra de los rayos ultra violeta y sus negativos efectos.


MODO DE EMPLEO


Aplicar la crema una o dos veces al día en la zona a tratar y masajear hasta su total absorción. En tratamientos en cabina, la esteticista dará un masaje reafirmante hasta que la crema sea absorbida, insistiendo en las zonas donde la flaccidez sea más notoria. En mujeres embarazadas, con carácter preventivo, se aplicará en abdomen y senos a partir del cuarto mes de gestación. Durante el periodo de lactancia se aconseja interrumpir el tratamiento. Se recomienda su uso tras tratamientos anticelulíticos con el Gel Friodermico Efecto Frío, para ayudar a la piel a recuperar su turgencia.






Informacion AdicionalLas cremas contra la flacidez o reafirmantes son aquellas que tonifican, alisan y refuerzan las fibras elásticas que se encuentran en la piel, a la vez que ayudan a regenerar los tejidos o células que han perdido su fuerza natural. Para lograr este objetivo incluyen proteínas, vitaminas y nutrientes cuya eficacia en la prevención y mejoramiento de la salud cutánea se ha comprobado.
A fin de comprender cómo actúan estas fórmulas y de qué manera aprovechar sus beneficios, debemos conocer un poco más la estructura y funcionamiento de este órgano que nos protege de las agresiones ambientales, nos ayuda a regular la temperatura corporal y recibe estímulos del exterior (sentido del tacto).
Cuando observamos la piel transversalmente a través del microscopio encontramos que la conforman tres capas:
Hipodermis o tejido subcutáneo. Es la zona más profunda y está constituida, fundamentalmente, por células que contienen grasa.
Dermis. Región intermedia que aloja a numerosos vasos sanguíneos, folículos pilosos (donde se produce el vello), glándulas sebáceas y sudoríparas, así como fibras de colágeno y elastina, proteínas que brindan resistencia y flexibilidad respectivamente, por lo que también se llaman estructurales.
Epidermis. Parte superficial que contiene melanina (responsable del color de la piel) y queratina, generada por células especiales (queratinocitos) con el fin de crear una capa resistente a la agresión de los rayos solares, químicos e incluso golpes; es el estrato córneo, el que vemos a simple vista.
Durante las primeras tres décadas de vida la epidermis se renueva prácticamente cada 3 o 4 semanas, de modo que la piel luce brillante y tersa; además, las fibras de elastina y colágeno localizadas en la dermis se encuentran fuertes e intactas, por lo que su firmeza es notable. Esto es mucho más notable en el rostro, que luce sin líneas de expresión a menos de que la persona sea de tez clara (al tener menos pigmento se encuentra más desprotegido) o se sobreexponga al Sol y contaminación.

El envejecimiento de la piel comienza aproximadamente a los 30 años, debido a que disminuye la velocidad de regeneración de las células y a que las proteínas estructurales comienzan a debilitarse; sin embargo, es a partir de la siguiente década que la flacidez se vuelve más notoria, pues además de que los procesos de restauración se entorpecen, los poros se agrandan, la pigmentación general se torna pálida y aparecen manchas oscuras por factores ambientales, depósitos de grasa, apariencia áspera, así como arrugas profundas.


Existen otros factores que maltratan a las estructuras cutáneas y aceleran su deterioro y pérdida de firmeza, como dieta pobre en nutrientes, estrés, subir y bajar de peso continuamente, embarazo, consumo de tabaco y alcohol, exposición a sustancias químicas, desvelarse, cambios hormonales derivados del climaterio o menopausia y algunas enfermedades, como infecciones causadas por hongos, anemia (mala distribución de oxígeno en todo el organismo por deficiencias en glóbulos rojos) o padecimientos autoinmunes, es decir, aquellos en donde el sistema de defensas del organismo ataca a sus propios tejidos, entre ellos los de la piel (lupus y síndrome de Sjögren, entre ellos).


Cabe mencionar que aunque la flacidez resulta más notable en el rostro debido a la presencia de arrugas, líneas de expresión y "patas de gallo" (en el hombre la afeitada acentúa este problema en tanto que en la mujer el uso de maquillaje), lo cierto es que los tejidos de otras partes del cuerpo, concretamente senos, abdomen, glúteos, muslos y parte interna de los brazos sufren envejecimiento por igual, sólo que lo manifiestan a través de pérdida de tres factores: elasticidad, suavidad y humedad. Todo esto nos permite comprender que el cuidado de la piel depende de la conjunción de varios factores, entre ellos la aplicación de productos nutritivos e hidratantes.

TEL 96.336.41.49